BIENVENIDO A BANKIA: EL ASQUEROSO ARTE DE ROBAR LEGALMENTE

Todos sabemos que el gobierno "socialista" ha impulsado la fusión de varias Cajas de Ahorros para "garantizar su propia seguridad y protección" en momentos de crisis. Sin embargo, no es más que otra estrategia para que los bancos, amiguísimos de los políticos, se enriquezcan más y más.

Pues bien, BANKIA se presenta en escena dando un buen mazazo a gran parte de la sociedad española, concretamente a los más desfavorecidos socialmente: los pobres, los parados y los mileuristas.

No han obtenido suficiente dinero público que van a cobrar comisiones precisamente a los que no pueden pagarlas y a los que tienen cuentas millonarias de euros no. Se las van a cobrar a aquellos que tienen un saldo medio inferior de 2.000 euros.

No tienen vergüenza alguna al hacer esto porque se están riendo de los parados, de los que no llegan a final de mes, de los que tienen que ir a pedir comida a la caridad o de los que malamente pueden pagar el alquiler o la hipoteca.

Con todo este dinero robado legalmente, Rodrigo Rato y Juan José Olivas, políticos del PP y presidentes de Cajamadrid y Bancaja, respectivamente, se van a repartir 10,15 millones de euros al año (1.688.817.900 pesetas). Entre todos los 34 directivos, la cantidad subirá a 24,19 millones de euros (4.024.877.340 pesetas). Esto sin contar los sueldos como consejeros o los dividendos de acciones, etc.

Veamos algunos datos más:

En la actualidad (2011) España tiene una tasa de desempleo del 20,7% de la población activa. BANKIA cuenta con 11,2 millones de clientes. Si asumimos que los clientes de BANKIA representan equitativamente a la sociedad española, podemos suponer que el 20.7% de clientes está en paro. Pues la entidad agrupada le va a robar dinerito por todo tipo de comisiones a más de 2 millones de clientes, los cuales pagarán los sueldos multimillonarios de un puñado de vampiros codiciosos respaldados por los partidos políticos.

Por todo esto y por mucho más, animo a todos los clientes de BANKIA a cancelar sus cuentas lo antes posible, aunque el problema viene después, cuando me planteo la siguiente pregunta: ¿y ahora donde me voy?. Es igual, pero con estos VAMPIROS no me quedo.